Editorial Temas de Hoy, 1996
«Este libro, escrito en un estilo periodístico ameno y fácil de leer, desenfadado pero bien documentado, está destinado a convertirse en una referencia imprescindible para quienes quieren conocer más a fondo a un país tan íntimamente relacionado con el pasado y con el presente de España».
Domingo del Pino, Revista Española de Defensa, Junio de 1996
En el café Haffa de Tánger huele a hierbabuena y a cannabis. Aziz, gerente de este local encaramado en un acantilado sobre el estrecho de Gibraltar, recuerda que aquí se colocaron, entre otros muchos, Mick Jagger y Jimmy Hendrix. Declina la tarde del domingo y las costas de Andalucía se van emborronando poco a poco, como si la cercaníade los continentes hubiera sido sólo un sueño de cannabis en una jornada clara y soleada. Pero no: muy pocos kilómetros separan dos continentes. España y Marruecos marcan el comienzo y final de dos mundos: al norte quedan la democracia, la prosperidad, la libertad de costumbres y la Unión Europea. También el individualismo, la violencia y la angustia. Al sur el autoritarismo, la lucha por la supervivencia y la separación de sexos. También la solidaridad, la dulzura y la paciencia. Hubo un tiempo en que ambas tierras eran una. Pero desde que Hércules realizará su hazaña, España y Marruecos quedaron definitivamente separadas por un trozo de mar.
Ésta es la escena reflexionada con la que arranca el libro La última frontera, escrito por los periodistas Javier Valenzuela, corresponsal del diario «El País» en Marruecos a finales de los años ochenta, y Alberto Masegosa, delegado de Efe en Rabat en los primeros años noventa del siglo XX. La relación entre España y Marruecos, señalan los autores, ha sido tradicionalmente, como la de la mayoría de vecinos, una historia tanto de intercambios humanos, económicos y culturales fecundos como de desencuentros, roces y malentendidos. De tal forma que Marruecos representa para cualquier Gobierno español, el principal asunto en política exterior.
Desde el contencioso de Ceuta y Melilla a la aventura migratoria a traves del Estrecho, pasando por el tráfico de drogas, la amenaza del terrorismo islamista o los conflictos pesqueros, Valenzuela y Masegosa, buenos conocedores del Magreb, van desvelando los resortes que mueven la relación entre los dos mundos. Escrito como una sucesión de reportajes, aderezado con retazos de historia y sazonado con entrevistas, La última frontera explica por qué hoy, como hace siglos, España y Marruecos siguen mirándose con tanta atracción como recelo a través de las aguas del Estrecho de Gibraltar.